Falsas Promesas

Destrozaste mi corazón

con promesas falsas de amor,

aquellas promesas que

mi corazón creía sinceras.

Con brillo en los ojos

acogía en mi corazón

las puñaladas mortales

de tus falsas promesas.

Que rasgaron la ternura,

hirieron gravemente la confianza

laceraron mis sentimientos,

abriéndome los ojos ante

la hipocrecía de tu amor.

Ahora las rosas que guardaba

en el jardín de mi corazón son

solo un cementerio de pétalos,

que dejó a su paso el invierno negro

al pasar por mi destrozado corazón.

Quizá no vuelva a amar,

porque será difícil que la

primavera de un nuevo amor

pueda reconstruir aquel

bello jardín de rosas rojas que

destrozaron tus falsas promesas.

Autor: Alan Roy Ferrer Avila.